Una vivienda que convive con las zonas exteriores
Esta vivienda contemporánea situada en Sevilla destaca por su equilibrio entre sobriedad y calidez. Se trata de un proyecto diseñado para integrarse con el entorno urbano y ofrecer un interior luminoso, cómodo y funcional, sin renunciar a un carácter elegante y atemporal.
Tipo
Cliente
Fecha
Superficie
Fotografías
Obra nueva
Vivienda
Octubre de 2024
257 m²
Pablo F. Díaz Ferros
La casa se organiza en una sola planta con una volumetría muy clara: líneas rectas, cubiertas planas y una cuidada combinación de materiales que aportan textura y color. Desde el exterior, predominan dos acabados: el blanco puro de las fachadas de mortero y los paneles de madera natural, que se utilizan tanto en el cerramiento como en algunos elementos interiores. Esta combinación crea un contraste sereno y cálido, acompañado de grandes ventanales que permiten la entrada de luz natural en todas las estancias principales.
La relación con el exterior es clave en este proyecto. La casa se abre hacia el jardín mediante grandes ventanales correderos que conectan directamente con un porche cubierto, ideal para disfrutar del clima sevillano durante gran parte del año. Además, en el jardín se ha incluido un estanque revestido de mármol verde, que aporta frescura y un punto de sofisticación muy especial.
El acceso se resuelve de forma muy limpia, con una puerta de madera enrasada que mantiene la continuidad del revestimiento, sin elementos superfluos. Una vez dentro, el espacio se abre de manera fluida entre cocina, comedor y salón, todo conectado visualmente y con vistas directas al jardín. El mobiliario sigue una línea contemporánea, con muebles de tonos neutros, superficies de piedra natural y detalles en madera y metal negro.
Materiales que dialogan con el tiempo, resolviendo con elegancia la funcionalidad.